12 enero 2011

Sirena

Publicado por Yareli

Comenzó por una fotografía de Lucía en el mar. Apareció entre los libros viejos que saqué antes de la mudanza, estaba ella mirando tímida hacia la cámara y la brisa le volaba el cabello en mechones mal amarrados de la coleta, parecía una sirena a punto de secarse. La foto la tomé yo en un viaje de generación que realizamos en la prepa, el clic se disparó poco antes de enterrarme un caracol en el talón y caer sobre la parte rocosa de la playa, Lucía no paró de reír mientras sin éxito intentaba ponerme de pie, me raspé las dos manos pero logré rescatar la cámara. Después nos quedamos mirando las olas venir hacia nosotros, hipnotizados por la imponencia marina, yo era -y lo sigo siendo salvo por la edad- un muchacho imbécil, así que fue ella quien me besó por primera vez, sus delgados labios atacaron con pequeñas mordidas, nunca la sangre tuvo un sabor tan dulce, ella no se detuvo, me pidió que la tocara y la toqué. Pasamos buena parte de la tarde perdidos del resto, aprendiendo a poner cada parte con su correspondiente, mano con mano, boca con boca, y su cabello suelto envolvía la arena en un mar negro. Nos besamos fuerte, apenas sentí como sus pechos dejaban de elevarse entre el agua. Caminé solo de regreso hacia donde estaba el grupo, muy orgulloso, la había devuelto al mar.