| * No me llegan tus cartas.Ni con los sobres coloreados de colores con misteriosos remitentes, ni llenas de frases de amor & promesas infinitas, ni llenas de momentos pasmados en un papel con un poco de playa de tu lugar de vacaciones. Tampoco entran misteriosamente por debajo de mi puerta. Ya no he podido recibir los contenidos de esas largísimas cartas en las que cada momento de tus vacaciones permanecía intacto sobre el blanco papel que me redactaba cada instante de tus días...
Ni la mejor paloma adiestrada lograría llevarte adonde me encuentro exactamente ahora...
Yo me encuentro vagando en esta inevitable lejanía a la cual solo podrás llegar cuando yo desee, que encuentres el camino correcto...
2 comentarios:
Y a veces sigues sentada con la esperanza a que una carta entre en el buzón... ilusa.. sabes que nunca legará el momento, pero, nerviosa, siempre esperarás...
Laura
Totalmente de acuerdo, a veces la soledad la deseamos tanto como la detestamos, y aun así esperas que alguien esté próximo.
Como siempre, muy buen texto.
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