24 febrero 2009

La creación literaria.

Publicado por Grupo Asobe

Cuando estas frente a una hoja de papel y tu único compañero es el lápiz, es natural que trates de invocar una sensación de inspiración. Hace mucho tiempo que no siento esa sensación de inspiración, de dejarme llevar por el lápiz y crear personajes inmersos en situaciones que mi mente ha dispuesto para ellos. Es bastante complejo definirla, ya que tiene relación un sentimiento personal, tal vez nostálgico y de añoranza de tiempos que ni siquiera existía el tiempo en este vasto universo. prefiero vincularlo con la sensación que probablemente embargo al creador al momento de estar al medio de un gran vacío que esperaba ser llenado, la soledad y la necesidad de entretención, junto con el ocio propio de llevar a cabo una idea que no sabe que resultado traerá consigo, fue lo que lo llevo a crear a todo lo existente hasta estos momentos, ese mismo sentimiento entiendo que sucede a las personas al momento de querer crear una obra artística, nos dejamos llevar por el lápiz y transcribimos cosas que nos dicta nuestra mente, dándole vida a personajes que tendrá que sostener situaciones que nuestra imaginación vaya proponiendo ellos, son merced de un variopinto de desafíos, de alguna manera uno tiende a experimentar con estos individuos nacidos de la imaginación, para saber cómo enfrentan y como reaccionan frente a esta traba en su caminar.

Algunas veces pienso, que esos seres que uno crea en la mente, de algún modo deambulan en otro país, en otro mundo, en otra dimensión, de tal manera que cuando la persona llega al punto de inspiración se conecta con ese mundo y logra despertar a los seres en letargo a la espera de comenzar a vivir en nuestras mentes, cuyo vehículo es la hoja de papel con el objetivo para ser plasmados en nuestros relatos, poemas, escritos, etc., etc. Ellos al despertar sufren un verdadero cambio en su línea temporal y comienzan a sufrir bifurcaciones que son las situaciones que tenemos planeados para ellos. Esta forma de actuar de la persona es propia de un creador, donde observa a sus personajes creados por el o prestados de este “mundo de las ideas”. En algunas situaciones nos compadecemos y les otorgamos armas para que se enfrenten a nuestro juego, de alguna manera nos vamos compadeciendo de algunos y otros sin embargo los dejamos vivir en el completa adversidad. Pero llega un momento que esta sensación de inspiración hay una etapa más intensa en la que se destaca porque tu no sabes bien cual será el destino de tus personajes, haciendo valer ese principio del libre albedrío tus personajes al estar tan completamente definidos en la historia que intentamos narrar, comienzan a realizar actos, que ni siquiera nosotros estamos seguros cual será su resultado, en esta fase nos volvemos espectadores, y nos entretenemos con la forma intensa de vivir de los personajes, ellos hacen y deshacen a su antojo y cuando terminamos de crear la historia, sufrimos un verdadero síndrome del nido vacío pero en conjunto con una sensación de alivio, ya que la historia ha terminado, y finalmente al ser publicada deja de ser nosotros, nuestros hijos comienzan a tener su propia autonomía y viven en la completa eternidad cada vez que es leído por un lector, que le otorgan vida ahora en su propia mente.

1 comentarios:

Pequeño Link dijo...

El arte de escribir es dar a luz a un hijo pensar, formarlo darlo a luz y luego dejarlos partir y que sean del mundo que todos puedan ver sus frutos ver la sutileza con la que un escrito llego hacer publicado verlo con vida,fructifera para que dos o cientos puedan de el ver lo que con simple lapiz una hoja y un papel puedan llegar hacer del Arte de Escribir,

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