12 febrero 2008

EL TANGO

Publicado por Grupo Asobe


Dicen que el tango es macho. El hombre lo lleva, es él quien dirige los pasos, quien le da sentido al giro y que gracias a él, los movimientos recobran vida.

El tango es macho, hasta incluso huele a él. Tú sólo te dejas guiar y aceptas las condiciones de sometimiento. Eres prisionera del baile, prisionera de la música, incluso de su cuerpo…
Sólo puedes cerrar los ojos y oler el aroma del hombre, saborear su mandato y seguir sometida.
El tango es macho porque cuando te das cuenta, te descubres bajo los focos rojos; es él quien te sostiene. Tú estás atada a sus manos, su barbilla te rodea el cuello, y a pesar de que tu vestido negro brille ante el público y ser tú la estrella, el hombre ríe, porque en el fondo es su creación.
La música comienza a sonar, se filtra por tu cuerpo y te incita a bailar junto a él… aunque no lo puedes hacer hasta que el hombre te lo ordene. Y captas la señal de orden: el hombre posa su pie al lado del tuyo; ese es el primer contacto, aparte de su barbilla y sus manos; en el resto del cuerpo hay una separación apenas visible que ambos notáis.
Comienza a arrastrar tu pie con el suyo… te guía.
Ya ni siquiera escuchas la música, porque tú tienes que posar tus cinco sentidos (y crear el sexto) sobre él… sólo la sientes ligeramente gracias a un canal, que es el cuerpo del hombre.

Cuando abres los ojos, descubres que él te sostiene bajo su pecho, y no te has enterado de eso, hasta que te has encontrado con su mirada.
Mientras tu cuerpo se topa casi contra el suelo, sabes que no te puedes liberar, sigues sometida.
La luz roja no cambia sólo la postura de los cuerpos, el cambio de los pasos.
Ya estás de pie cuando te vuelves a dar cuenta del movimiento. La música suena más fuerte… como una hoguera chispando cada vez con más intensidad. Sientes su calor corporal, que junto al tuyo, se convierte en el fuego más ardiente del universo. Ambos sois pasión.
Los pies son lo más importante del baile, que él los dirige, por supuesto; pero la mirada de los dos, llena de pasión y seriedad al mismo tiempo, es lo que transmite la belleza del tango.
La espalda siempre recta, la mirada al frente... no lo mires, sólo él te puede mirar.
Y ahora llega el toque más sensual del baile… es el momento en el que la mujer se libera y comienza a dominar... Levantas la pierna, brillante de sudor, la posas sobre su cadera, te lanzas hacia el suelo y no dudas ningún momento de que no podrás caer, porque sabes que lo dominas, que lo seduces, que le hechizas… Está encantado con tu belleza, hipnotizado… y es el momento más emocionante del baile…

¡Oh sí! Dicen que el tango es macho, pero sólo porque lleva esencia de mujer…

Laura Martínez.

Mi propósito con este escrito no es hacer una definición ni una descripción del baile del tango, va mucho más allá. El machismo y feminismo en este mundo es mi tema de hoy. Primero dominó el hombre, y cuando nosotras luchamos por la igualdad, al final dominamos también; al final estamos en las mismas. Por supuesto, siendo yo del rango femenino, he echo una descripción mucho más larga del machismo; pero no porque sea feminista o algo parecido, si no, porque a pesar de que los tiempo han cambiado, este problema sigue en muchos lugares y países de éste mundo, y no hace falta irse a países orientales, aquí mismo en España, mueren más de cien mujeres al año por violencia de género, y otras tantas son sometidas bajo el cargo del hombre...


Laura Martínez.

6 comentarios:

Matías Irarrázabal dijo...

Hola

bastante sensorial y expresivo tu texto, siento que intentas mostrar los roles de los géneros, cada uno se complementa no me gusta la discusión de la dominación de un sexo a otro, sino que hay que encontrar la forma en como podemos avanzar juntos

saludos cordiales

Ignacio Castro Calderón dijo...

Eso me decía mi primo, cuando viene para acá me pone la Antena 3 y la TVE en las noticias y me muestras que no muestran mas de asesinatos conyugales.

mario dijo...

Como argentino, soy amante del tango. Hay melodías conmovedoras y poemas desgarradores que pintan la desolación de algún desamor, como así también nos transporta hacia rincones mágicos de la Ciudad de Buenos Aires.

EL baile del tango es muy bello, cargado de una gran sensualidad entre los bailarines, con un rico lenguaje de miradas, movimientos y poses.

Llevo muchos años escuchando tangos (aunque no sea mi música predilecta) y no recuerdo haber escuchado alguna vez que sea un baile "macho" como describe Laura en esta nota. Si vos escuchás la mayoría de las letras de muchos tangos, caerás en la cuenta de que hablan de hombres que fueron abandonados por sus "percantas" (en el lenguaje tanguero significa "mujeres").

Creo que el tango está mucho más allá de machismos y femenismos: Es más bien una cuestión de que cada sexo aporta su aura para converger en una diálogo único sin palabras en el que se manifiestan las almas al son de sus cuerpos con la música ciudadana de fondo.

Al observar una pareja bailando un tango (bien bailado, no como se vé en películas anglosajonas), se puede comprobar que los movimientos de la mujer son tan protagonistas como los del hombre. Es un baile centrado en la mutua seducción que se prodigan hombre y mujer.

El baile del tango no es una cuestiónde géneros, sino más bien de llevar el rol que cada sexo tiene por naturaleza hasta el límite.

Te mando un beso grande desde este otro lado de la Cordillera de los Andes.

Laura dijo...

Respecto al comentario de Mario. Seguramente estará en lo cierto en todo lo que me ha destacado del tango. No será machista, ningún baile lo és. Puede que yo no me haya expresado bien al escribir, pero si no me equivoco, en ningún momento he dicho que en el tango la mujer no recobra vida ni que sea marginada, al contrario, ella es la protagonista, creo que he puesto. Lo único, ya no solo del tango, si no de cualquier baile, me he basado en el dominaje del hombre sobre los pasos para poder crear asi un debata machista y feminista.
No excluyo su opinión acerca de mi artículo, Mario, y por supuesto, teniendo en cuenta que no soy especialista en tangos, tal y como se ve, sólo quería crear una metáfora. Así mismo, luego digo que es la mujer quien domina asi es que en ningun caso excluyo a ningun sexo del Dominio entre la pareja del baile.

Gracias por aportar sus opiniones ;-)

Asobe dijo...

Lau, te entendí perfectamente, pero pienso que el tema de la "lucha" o "libertad, de acción o dominación" entre sexos debe ser mirado con los ojos más responsables que puedan formarse dentro de nuestra existencia.
Pues en un sexo la dominación es esencial, en el otro muy humano... y lo muy humano genera efectos, que son tan desagradables, como perverciones, hijos mal criados, y problemas con la personalidad masculina... es un tema complicado que no se puede ver como una especie de "discriminación hacia la mujer de parte del hombre o hacia el hombre de parte de la mujer" la cuestión no se trata de algo tan vil y superficial como lo ve la mujer resentida... creo que el problema fundamental es que la mujer no entiende el concepto, y el hombre enfermo misogeno destruye esa combinación perfecta entre un buen hombre y una buena mujer... que lo unico positivo que entrega, es una familia fortalecida y unos hijos mentalmente sanos... y como las cosas por ejemplo en chile ya no son así, ve a un tribunal de familia y veras que la estupidez del feminismo tiene mucho que ver en el fenomeno social que esta destruyendo a la mujer y a la familia

Pau dijo...

Lau, entiendo cual es el mensaje que quisiste enviar con este texto. Sin embargo, creo no fue el mejor para poner en la palestra el tema de la igualdad de sexos, por el contrario siento que entre lineas es más fácil leer la dominación y el poder de cada genero que una igualdad de condiciones. En nuestro país, este es un tema muy sensible, al igual que en España, estamos llegando casi a los 60 femecidios al año. Comparto lo que comenta Matias, hoy es más importante encontrar la forma en como podemos avanzar juntos.
Salu2

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