15 septiembre 2009

Iglesia Universal del Reino de Dios cada vez más desemascarada

Publicado por Grupo Asobe

 [PARE-DE-PAGAR.jpg]


Después de la apertura de las investigaciones a la Iglesia Universal del Reino de Dios, por lavado de activos en Brasil, las autoridades de Ecuador y Perú han encontrado motivos para abrir investigaciones parecidas contra esta secta.

Parece ser que después de décadas de lucro por parte de Edir Macedo sus obispos y pastores algunas autoridades han empezado a reaccionar. Sin embargo, en otros lugares, como en Colombia, los feligreses de la secta siguen vendiendo aceite de Israel, mantos sagrados, sin que las autoridades se inmuten.

En Perú una exfeligrés ha denunciado a la secta en la fiscalía y recibió luego amenazas contra su vida. ¿serán cosas del Espirítu Santo?, mientras que extesorera de la secta denuncia como fraude la parafernalia de artículos que la secta comercializa.


Los dejo con las noticias de la prensa peruana:

"Pare de Sufrir" falsifica aceite santo, sal de Jerusalén, agua bendita y Manto Sagrado

Lima - Perú, (ORBITA).- La ex tesorera de la iglesia brasileña "Pare de sufrir" Rosario Guadalupe Marti Mar (49) reveló que dicha comunidad viene engañando a la población falsificando el aceite santo y la sal de Jerusalén, el agua bendita y el Manto Sagrado.
"No traen la sal de ningún lado, el aceite santo es de cocina, el agua es del caño y el manto se compra en cualquier lado", contó a 'Reporte Semanal' al señalar que muchos de los necesitados empeñaban objetos personales para pagar la cuota.
"Te trataban como a cualquiera de la calle. A los obreros nos obligaban a participar en las campañas. Muchos empeñaban sus televisores, aros de matrimonio y hasta dejaban de darle comida a sus familias para dar las ofrendas", relató.
En tanto, Vilma Meléndez denunció que dicha congregación religiosa la estafó con 120 mil dólares en el lapso de diez años, por lo que entabló una acusación judicial en el 2007. Pese a las pruebas, el Poder Judicial decidió archivar el caso.
Asimismo, la mujer aseguró que viene recibiendo amenazas de muerte por denunciar que dicha iglesia estafa a la población con el cuento de la sanación espiritual, por lo que se ha visto obligada a pedir garantías personales para su vida.
"Maldita perra, lo pagarás caro, sigues ya verás. Luchando contra un gigante, si sigues te embarramos… es sencillo aplastarte. Endemoniada revelada, tú no puedes contra nosotros. Dios está de nuestro lado", dicen varios mensajes de texto.
Contó que un pastor llamado Jacob iba a visitarla constantemente a su tienda para "ungirla", tras lo cual aprovechaba para pedirle los diezmos. En tanto, el obispo de dicha iglesia en el Perú, Clodoaldo Pajuelo Chávez, dijo brevemente que están "tranquilos".
Cabe indicar que la iglesia "Pare de sufrir" invirtió en la compra de 20 camionetas, una cochera de 150 mil dólares en La Victoria, otros 650 mil en la compra de un local en la avenida Venezuela y 450 mil más por otro local en la avenida Iquitos.

Mujer que denunció a ´Pare de Sufrir´ recibe amenanzas
La creyente Vilma Meléndez Valencia seguidora de la Comunidad Cristiana del Espíritu Santo llamada "Pare de Sufrir", denunció haber sufrido una estafa por parte de esta institución religiosa."Durante 10 años yo he dado más de 120 mil dólares", señala la víctima.
Dos años después, la Fiscalía Penal de Lima, denunció a la institución por presunto lavado de activos, asociación ilícita para delinquir y estafa en agravio del estado y su feligresía.En Brasil, tampoco fue distinta la historia, donde las autoridades, denunciaron a Edi Macedo, cabeza de la comunidad cristiana y conductor del sintonizado programa "Pare de Sufrir"."
En cada reunión recaudaban los diezmos, ofrendas, sobres y realmente ellos no registran, no tienen registros de las ofrendas", señala Vilma Meléndez.
A pesar de lo ocurrido, la creyente cristiana asegura que su fe está más fuerte que nunca y que "estos pastores pueden engañar a los hombres, pero a Dios no".Mientras espera justicia, tiene que lidiar con los constantes mensajes amenazantes que su celular registra, razón por la que indica "no tener paz".
La denuncia fiscal está en manos del 30 Juzgado Penal de Lima, donde sólo se espera a que el juez abra instrucción.